Con motivo del Día Mundial de la Rabia, una iniciativa de la organización Alianza para el Control de la Rabia (ARC) que instituyó el 8 de septiembre, y teniendo en cuenta los casos de rabia registrados recientemente en la provincia de Catamarca, adjuntamos una información de prensa sobre esta enfermedad realizada por especialistas de CAPROVE (Cámara Argentina de la Industria de Productos Veterinarios) - Comisión de Animales de Compañía.
Salud – prevención de enfermedades zoonóticas
Rabia, una amenaza siempre presente.
En los últimos años se registraron casos en ciudades como Córdoba, Chascomús, La Plata y Bahía Blanca. Aún no se toman los recaudos necesarios para prevenir esta grave enfermedad.
Toda mascota puede ser transmisora de enfermedades a los hombres, por lo que es importante estar informados y tener en cuenta la implementación de medidas sanitarias como la vacunación y los controles periódicos de los animales domésticos por parte de los veterinarios.
Las mascotas pueden contraer enfermedades como la rabia, y pueden transmitirla a los seres humanos. La rabia es una enfermedad viral con distribución casi mundial. Se trata de una zoonosis (enfermedades que se transmiten del animal al hombre o viceversa) producida por un virus que ataca al sistema nervioso central de las personas o animales, al que llega a través de los nervios de la zona de mordedura o contacto. La rabia es una enfermedad mortal para la que no existe tratamiento.
El virus de la rabia se encuentra en la saliva y es el factor de transmisión en un animal infectado que al morder contagia la enfermedad. El virus puede estar presente en la saliva muchos días antes de la aparición de los signos clínicos y puede ser secretado de manera constante o intermitente hasta justo antes de la muerte del animal infectado.
Un agente portador común es el murciélago y consecuentemente donde la población de éstos aumenta, aumenta el riesgo de casos de rabia.
En el año 2003 se registraron 157 casos de rabia en las provincias de Salta y Jujuy en la frontera con Bolivia. Entre noviembre de 2006 y febrero de 2007 hubo 9 casos más en Jujuy.
Entre los casos más cercanos se puede destacar el de un gato doméstico con rabia detectado en 2002 en Chascomús, provincia de Buenos Aires, y el de un perro en la ciudad de Córdoba el mismo año. En ambos casos, los animales, que debieron ser sacrificados, habían estado en contacto con murciélagos con rabia.
En el 2004, se encontró un murciélago con rabia en el fondo de una vivienda en La Plata pero no generó graves consecuencias. El año pasado apareció uno de estos mamíferos infectados en Bahía Blanca y tres especies en Santa Fe, lo que generó preocupación en ambas provincias.
Tanto en la Capital Federal como en las principales ciudades del interior se considera un mal latente ya que la rabia puede transmitirse no sólo a través de perros, sino también de gatos, ratones, conejos y murciélagos, entre otros animales de sangre caliente.
Síntomas
La primera evidencia de la enfermedad en los animales suele notarse en el cambio de conducta (un perro manso puede pasar a ser un perro violento y mordedor) así como cambios en el sonido de voz (ladridos, maullidos, etc.).
En el caso de los murciélagos, es importante tener en cuenta que cuando vemos uno que vuela de día o se encuentra en el piso, es muy probable que haya contraído la enfermedad y es riesgoso su contacto con el hombre o animales domésticos ya que pueden ser mordidos y contagiados.
Prevención
Especialistas sostienen que la vacunación anual de perros y gatos es la única herramienta efectiva para la prevención de la rabia.
La vacunación antirrábica es obligatoria en todo el país, y cada propietario de mascotas debe recurrir a su veterinario a fin de que anualmente se proteja a su animal de la enfermedad. Sin embargo, el gran problema de la rabia es la cantidad de animales callejeros.
“Cuando una persona es mordida por un perro se debe actuar según el procedimiento standard aprobado por la OMS (Organización Mundial de la Salud)” sostiene el médico veterinario Fernando Marino, Subrogante de la Dirección del Laboratorio Central de Salud Pública de la Provincia de Buenos Aires. “Se debe dejar a los perros en observación por diez días para su control, más allá de que el animal haya sido previamente vacunado contra la enfermedad” para corroborar que esté libre de rabia.
En caso de que se detecte un animal mordedor, el propietario tiene 48 hs para presentarlo a realizar la Observación Antirrábica. Si no lo hace, se debe denunciar ante la policía quien lo obligará a hacerlo o derivará el animal al Instituto Antirrábico local.
Consejos de CAPROVE*
Si una persona ha sido mordida por un animal, se debe considerar la posibilidad de que el animal tenga rabia. Así se tomarán los recaudos necesarios para evitar el contagio mortal de esta enfermedad.
1) Realizar un lavado inmediato y enérgico de las heridas con agua y jabón. (Nunca desinfectar con alcohol).
2) Visitar a un médico y/o centro de asistencia antirrábica.
3) Localizar el animal para que sea controlado.
Si el animal es localizado, se le debe realizar una observación antirrábica a través de un veterinario.
Si el animal es localizado, se le inicia a la persona mordida la terapia preventiva contra la rabia.
4) Si el dueño se niega a realizar la observación antirrábica, se debe realizar la denuncia policial. La Policía mediante la fuerza pública obligará al dueño a realizarla o secuestrará al animal mordedor para llevarlo a un centro antirrábico.
La observación dura 10 días y requiere 5 consultas del profesional.
¿Por qué? Porque el virus en un animal infectado se libera por saliva días antes de la presentación de los síntomas de rabia. Si observado por 10 días el animal no presentó síntomas de rabia, se considera que no transmitió la enfermedad.
*CAPROVE: Cámara Argentina de la Industria de Productos Veterinarios – Comisión de Animales de Compañía.
Más detalles: www.caprove.com.ar
lunes, 10 de septiembre de 2007
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